¿Acaso Dios tiene una esposa?

Algunos historiadores han tratado de presentar una historia en la que Dios y Asherah, una diosa madre que se encuentra en las antiguas religiones semíticas, estuvieron casados durante un tiempo en el antiguo Israel, aunque no hay ninguna evidencia que apoye esta teoría.

La biblia establece claramente que Dios no tiene una esposa o una compañera romántica de ninguna clase. En Génesis 2:18, vemos que Dios creó el matrimonio para los humanos: "Dijo el Señor Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él". De la costilla de Adán, Dios creó a Eva, la primera mujer, y la ayuda adecuada que Dios diseñó. Adán estaba solo, así que Dios le hizo una compañera. Como Dios es un ser trino, Padre, Hijo y Espíritu Santo, está unificado en sí mismo y nunca ha estado solo. Esto significa que no necesita tener una pareja o una esposa. Él tiene una relación de amor dentro de su propio ser.

Para las personas, el matrimonio está diseñado sólo para nuestras vidas en la tierra; no durará en la eternidad. Los saduceos le hicieron a Jesús una pregunta hipotética sobre el matrimonio en la eternidad, a la que Él respondió: "Porque en la resurrección ni se casarán ni se darán en casamiento, sino serán como los ángeles de Dios en el cielo" (Mateo 22:30). Lo que vemos en las escrituras es que el matrimonio fue una asociación creada por Dios para los seres humanos aquí en la tierra.

Hay que destacar que la biblia utiliza la imagen del matrimonio cuando se refiere a la relación de Dios con Su pueblo. El Antiguo Testamento habla de que Dios está casado con Israel, y con frecuencia se refiere a la idolatría de Israel a modo de adulterio espiritual (ver Ezequiel 16 y el libro de Oseas, como ejemplo). El Nuevo Testamento compara la relación marido-esposa con Cristo y la iglesia (Efesios 5:21-33) y utiliza imágenes nupciales para hablar de Cristo y la iglesia (2 Corintios 11:2). El Apocalipsis habla de la cena de las bodas del Cordero (Apocalipsis 19:6-10). Pero nada de esto significa que Dios esté casado desde el punto de vista humano de tener una esposa. Por el contrario, se trata de un lenguaje simbólico que pretende ilustrar la relación de Dios con Su pueblo.

Otras religiones paganas de esa época presentaban con frecuencia a sus dioses como si tuvieran parejas románticas, esposas y otros intereses amorosos, aunque estos dioses eran falsos ídolos (ver Jeremías 2:11). El Único Dios Verdadero de la biblia nunca ha estado casado y nunca lo estará.