La existencia de Dios ha sido comunicada a la humanidad a través de la palabra escrita de Dios en la Biblia, la evidencia en la creación misma, y mediante la revelación de Jesucristo, la imagen visible del Dios invisible.
La Biblia atestigua la existencia de Dios. "Antes que nacieran los montes, Y Tú dieras a luz la tierra y el mundo, Desde la eternidad y hasta la eternidad, Tú eres Dios." (Salmo 90:2). Dios existe desde la eternidad hasta la eternidad. El salmista escribió: "El necio ha dicho en su corazón: «No hay Dios». Se han corrompido, han hecho obras abominables; No hay quien haga el bien." (Salmo 14:1). Negar la existencia de Dios es una maldad y una insensatez absoluta. Dios ha revelado Su existencia a través de la creación y, sin embargo, muchos hoy en día siguen negando lo que es obvio y verdadero: "Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres, que con injusticia restringen la verdad. Porque lo que se conoce acerca de Dios es evidente dentro de ellos, pues Dios se lo hizo evidente. Porque desde la creación del mundo, Sus atributos invisibles, Su eterno poder y divinidad, se ven claramente, siendo entendidos por medio de lo creado, de manera que no tienen excusa. Pues aunque conocían a Dios, no lo honraron como a Dios ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos y su necio corazón fue entenebrecido. Profesando ser sabios, se volvieron necios," (Romanos 1:18-22). Finalmente, Dios ha revelado Su existencia en la persona de Jesucristo: "en estos últimos días nos ha hablado por Su Hijo, a quien constituyó heredero de todas las cosas, por medio de quien hizo también el universo. Él es el resplandor de Su gloria y la expresión exacta de Su naturaleza, y sostiene todas las cosas por la palabra de Su poder. Después de llevar a cabo la purificación de los pecados, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas," (Hebreos 1:2-3).
La mayoría reconoce la existencia de un Creador, pero algunos dudan tontamente de la existencia de Dios. A los escépticos de la existencia de Dios podemos preguntarles: ¿Por qué existe algo? ¿Por qué estamos aquí? ¿Por qué hay algo en lugar de nada? Al considerar la cuestión de la existencia de Dios, se han propuesto tres respuestas populares: (1) El universo es una ilusión, nada existe realmente; (2) El universo siempre ha existido; (3) Algo o alguien (alias Dios) hizo que el universo existiera. Cualquiera que sea la proposición que una persona elija creer, esa persona está ejerciendo una medida de fe. De las tres, ¿cuál es la más plausible? La Biblia ofrece la explicación más comprensible y lógica de por qué existen las cosas, quién lo hizo todo y por qué estamos aquí en la Tierra. La Biblia afirma con veracidad que Dios siempre ha existido y que, en el momento que Él eligió, creó todas las cosas en el cielo y en la tierra, incluidos los seres humanos. Los seres humanos fueron creados para tener una relación con Dios, para conocerlo y darlo a conocer en todo el mundo. Sin embargo, el pecado entró en el mundo y trajo la muerte a las personas y destruyó nuestra relación con Dios. La buena noticia es que Jesús vino a salvar a la gente del mundo del pecado y de la muerte a través de Su muerte en la cruz y Su resurrección de entre los muertos. Por la fe en Jesucristo, una persona queda reconciliada con Dios, recibe la vida eterna y el perdón de todos sus pecados. Aquellos que conocen a Jesús, pueden saber que Dios existe, tener una relación con Él y disfrutar de la vida con Él ahora y por toda la eternidad.