Dios ha revelado Su existencia a la humanidad a través de la Biblia, de Su creación del universo y de Jesucristo. Mediante la fe en Jesucristo, podemos conocer a Dios y disfrutar de una vida eterna con Él.
La existencia de Dios se revela tanto en la Biblia como en el mundo natural. Dios es el Creador eterno, que existe desde la eternidad hasta la eternidad, y negar Su existencia es una necedad (Salmo 90:2, Salmo 14:1). El Nuevo Testamento confirma además que la creación da testimonio de la realidad de Dios (Romanos 1:20) y que Jesucristo, como Hijo, revela la naturaleza de Dios y sustenta todas las cosas (Hebreos 1:2-3). Los argumentos a favor de la existencia de Dios, como los argumentos de la causa, el diseño y la moralidad, apoyan la creencia en un Creador inteligente. En última instancia, la Biblia enseña que Dios creó a la humanidad para que tuviera una relación con Él. A través de la fe en Jesucristo, podemos conocer a Dios y disfrutar de una vida eterna con Él.
Se han presentado muchos argumentos a favor y en contra de la existencia de Dios. Aunque la mayoría reconoce que existe algún tipo de ser superior, algunos han dudado neciamente de Su existencia. Estos son algunos de los argumentos más comunes a favor de la existencia de Dios. El Argumento de la Causa: todo lo que existe tuvo que venir de algo anterior, es decir, de Dios. Filosóficamente, se presenta así: (1) Todo lo que tuvo un principio, tuvo una causa (principio de causalidad); (2) El universo tuvo un principio (lo cual está respaldado por la segunda ley de la termodinámica, la expansión del universo y el eco de la radiación de la explosión inicial); (3) Por lo tanto, el universo tuvo una Causa. El Argumento del Diseño: todo diseño tiene un diseñador; el universo revela un diseño complejo; por lo tanto, el universo tiene un Diseñador. Este diseño se observa tanto a nivel macro (el diseño del universo estudiado por la astronomía) como a nivel micro (el diseño a nivel celular). Ambos apoyan la idea de formas de vida sumamente complejas y diseñadas que no tienen explicación adecuada sin una fuerza externa y poderosa capaz de un diseño inteligente. Este Diseñador Inteligente apunta a la existencia de Dios. El Argumento de la Moralidad: (1) Toda ley tiene un legislador; (2) Existe una ley moral absoluta; (3) Por lo tanto, debe existir un Legislador absoluto. En respuesta a quienes cuestionan la existencia de una ley moral absoluta, C. S. Lewis escribió en Mero Cristianismo: “Desde el momento en que dices que un conjunto de ideas morales puede ser mejor que otro, en realidad, los estás midiendo a ambos con una misma norma, diciendo que uno de ellos se ajusta más a esa norma que el otro. Pero la norma que mide dos cosas es algo diferente de cada una de ellas. De hecho, estás comparando ambas con una Moral Real, admitiendo que existe algo así como un Bien absoluto, independiente de lo que la gente piense, y que las ideas de algunas personas se acercan más a ese Bien real que otras. O dicho de otro modo: si tus ideas morales pueden ser más verdaderas, y las de los nazis menos verdaderas, debe existir algo —una Moral Real— con la que poder contrastarlas”. Independientemente de si alguien cree o no en la existencia de Dios, esa persona está ejerciendo un grado de fe. Todo el mundo confía en algo aunque no pueda verlo plenamente, por lo que ejerce fe al creer en ello. Por ejemplo, todos creemos en la gravedad o en la existencia del amor, aunque no podamos verlos. La Biblia ofrece la explicación más completa y lógica de por qué existen las cosas, quién lo hizo todo y por qué estamos aquí en la Tierra. La Biblia afirma con veracidad que Dios siempre ha existido y que, en el momento que Él eligió, creó todas las cosas en el cielo y en la tierra, incluidos los seres humanos. Los seres humanos fueron creados para tener una relación con Dios, para conocerlo y darlo a conocer en todo el mundo. Sin embargo, el pecado entró en el mundo, trajo la muerte y destruyó nuestra relación con Dios. La buena noticia es que Jesús vino a salvar a la humanidad del pecado y de la muerte mediante Su muerte en la cruz y Su resurrección. Por la fe en Jesucristo, somos justificados ante Dios, se nos da vida eterna y se nos perdonan todos nuestros pecados. Quienes conocen a Jesús, pueden saber que Dios existe, tener una relación con Él y disfrutar de la vida a Su lado, ahora y por toda la eternidad.