¿Qué significa orar en el Espíritu?

El concepto de orar en el Espíritu se menciona tres veces en el Nuevo Testamento. La primera se encuentra en 1 Corintios 14:15: "¿Qué, pues? Oraré con el espíritu, pero oraré también con el entendimiento; cantaré con el espíritu, pero cantaré también con el entendimiento". En este contexto, Pablo está diciendo que orar en el Espíritu es bueno, pero algo que nadie entiende no sirve de mucho a nadie (1 Corintios 14:17). El deseo de Pablo era amar al Señor con toda su alma, mente y fuerzas (Marcos 12:29-31; Mateo 22:37-40). Para poder hacerlo, tanto sus oraciones como sus palabras tenían que ser significativas tanto para el corazón como para la mente. La referencia que hace Pablo aquí a "orar en el espíritu" no se puede interpretar como algo que la propia persona que ora no entiende.

La segunda vez que se menciona la oración en el Espíritu se encuentra en Efesios 6:18. Aquí, Pablo dice: "orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu". En este contexto, Pablo instruyó cómo orar por él durante sus trabajos misioneros "para los cuales [era] embajador en cadenas" (Efesios 6:20). Quería que los creyentes oraran en el Espíritu para que Dios le permitiera proclamar el Evangelio con denuedo durante su permanencia en Roma.

La tercera vez que se menciona la oración en el Espíritu es en Judas 1:20-21. Judas escribe: "Pero vosotros, amados, edificándoos sobre vuestra santísima fe, orando en el Espíritu Santo, conservaos en el amor de Dios, esperando la misericordia de nuestro Señor Jesucristo para vida eterna". Aquí, Judas incluye a las tres Personas del Dios Trino -Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu- para enfatizar el importante papel que cada una tiene en nuestras vidas. Mediante el crecimiento y la oración, los creyentes debían acrecentar su amor a Dios mientras se preparaban para la eternidad con el Señor.

Algunos interpretan "orar en el Espíritu" como una referencia a orar en lenguas u otros idiomas que se menciona en 1 Corintios 14. Sin embargo, el contexto de ese capítulo en realidad parece estar contrastando "orar en el Espíritu" con hablar en lenguas. Específicamente, Pablo aclara-para ambos-que debe haber un mensaje entendible para que tenga algún significado. Los que oraban en otra lengua o idioma lo hacían para el beneficio de los incrédulos (1 Corintios 14:22). Orar, o hablar, con palabras que nadie entiende es inútil, y en ninguna parte de la Biblia se recomienda.

Además, hablar en una lengua o idioma se mencionaba como un don disponible sólo para algunos en la iglesia (1 Corintios 12:7-11). Por el contrario, orar en el Espíritu era un mandamiento para todos los creyentes. Por eso, orar en el Espíritu debe ser una actividad diferente, ya que a todos los cristianos se les enseñó que debían hacerlo.

Orar en el Espíritu es la enseñanza bíblica de la oración tanto con emociones como con intelecto con total dependencia del Espíritu de Dios para ayudar a orar correctamente a Dios Padre a través de Jesús el Hijo de Dios. Cuando oramos según el Espíritu de Dios podemos orar de acuerdo con la voluntad de Dios y estar seguros de Su perfecta respuesta a nuestras peticiones.