¿De qué manera puedo evitar ir al infierno?

La Escritura es clara en que después de la muerte, cada persona pasará la eternidad en el cielo con el Señor o en el infierno lejos de Él (Lucas 16:19-31). Por lo tanto, ahora es fundamental saber cómo evitar el infierno y pasar la eternidad con Dios. ¿Cómo podemos escapar del juicio del infierno?

Las Escrituras dejan en claro que todos hemos pecado y estamos destituidos de la gloria de Dios (Romanos 3:23). El pecado nos separa de Dios. Puesto que Dios es perfecto, no podemos estar en Su presencia en el cielo a no ser que se hayan borrado nuestros pecados. De hecho, Romanos 6:23 enseña que: "la paga del pecado es muerte, más la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro".

La respuesta al pecado humano y a la separación de Dios por causa del mismo sólo se encuentra en Jesucristo. Él ofrece la vida eterna como un don gratuito a todas las personas. Juan 3:16 explica: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna".

La Biblia nos enseña cómo podemos creer en Jesús y tener vida eterna y no pasar la eternidad en el infierno. Romanos 10:9 nos dice, "que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo". Aquí vemos que debemos creer que Jesús es el Señor y que resucitó después de morir en la cruz. Al hacerlo, lo recibimos en nuestras vidas y nos convertimos en hijos de Dios (Juan 1:12).

¿Acaso esto significa que podemos estar seguros de que no vamos a ir al infierno? La Biblia afirma: "Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna" (1 Juan 5:13). Cuando creemos en Jesús por fe como el Hijo resucitado de Dios y Señor, podemos confiar en la promesa de que siempre estaremos con Él. Nada puede separarnos del amor de Dios (Romanos 8:37-39).

Romanos 5:8 dice: "Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros". Este gran amor fue el que trajo a Jesús a este mundo para que viviera, muriera y resucitara a fin de darnos la oportunidad de alcanzar la vida eterna creyendo en Él.

Mejor aún, ¡la vida eterna empieza mientras vivimos en la tierra! La salvación no sólo se trata de evitar el infierno; se trata de aceptar la verdadera vida en Cristo (Juan 10:10).

Ninguna oración te puede salvar. Sólo Jesús puede hacerlo. Sin embargo, para aceptar a Jesús como tu Salvador y recibir la vida eterna, puedes decirle a Dios algo parecido a esto:

"Dios, reconozco que soy un pecador y que nunca podría llegar al cielo por mis propias buenas obras. Ahora mismo pongo mi fe en Jesucristo como Hijo de Dios que vivió una vida perfecta, murió como sacrificio por mis pecados y resucitó de entre los muertos para darme vida eterna. Por favor, perdona mis pecados y ayúdame a vivir para ti. Gracias por aceptarme y darme la vida eterna".




Verdad relacionados:

¿Por qué necesito ser salvo?

¿Quién puede salvarse?

¿Qué es la Salvación?

¿Cómo puedo tener una relación personal con Dios?

¿Quién es Jesucristo?


Volver a:
La verdad sobre la salvación











Buscar:



Navegación

Acerca

Fe