¿Puede una persona masturbarse sin que sea pecado?

La masturbación generalmente se considera una actividad pecaminosa debido a su conexión con el comportamiento lujurioso. Para obtener más información respecto a por qué es así, lea nuestro artículo "¿Es la masturbación un pecado según la Biblia?" En este artículo, buscamos abordar la pregunta desde el ángulo opuesto. ¿Hay alguna situación en la que masturbarse no sea pecaminoso?

Primero, una persona tendría que poder masturbarse sin pensamientos lujuriosos, algo que es altamente improbable.

Suponiendo que una persona pueda hacer esto, ¿qué pasa con las situaciones en las que los esposos y las esposas están lejos unos de otros durante un largo período de tiempo (como en el servicio militar) y cualquiera de los dos cónyuges se masturba mientras piensa en el otro cónyuge? Esto también debería suponer que los cónyuges se han dado el uno al otro permiso para hacerlo (1 Corintios 7: 4). En el mejor de los casos, una persona podría decir que tal vez esto no sería pecaminoso. Romanos 14: 5 enseña: "Cada uno debe estar firme en sus propias opiniones.". Con respecto a tales áreas, las Escrituras no hablan específicamente en contra. Además, Romanos 14:23 es claro que "Y todo lo que no se hace por convicción es pecado." Esto significa que la convicción de los creyentes individuales jugará un papel en tal situación.

Sin embargo, en lugar de buscar un "vacío legal" o una forma de hacer que la masturbación sea aceptable como cristiano, los cristianos están llamados a "[ofrecer] su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios. No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente." (Romanos 12: 1-2). Además, 1 Corintios 6:18 enseña que debemos "[huir] de la inmoralidad sexual. Todos los demás pecados que una persona comete quedan fuera de su cuerpo; pero el que comete inmoralidades sexuales peca contra su propio cuerpo." 1 Tesalonicenses 5:22 dice: "Eviten toda clase de mal."

Las Escrituras llaman a todos los creyentes a resistir la tentación en lugar de buscar formas de excusar el pecado. 1 Corintios 10:13 es claro: "Ustedes no han sufrido ninguna tentación que no sea común al género humano. Pero Dios es fiel, y no permitirá que ustedes sean tentados más allá de lo que puedan aguantar. Más bien, cuando llegue la tentación, él les dará también una salida a fin de que puedan resistir." Cuando llega la tentación, también hay una forma de escapar. Incluso cuando Jesucristo fue tentado después de 40 días de ayuno, confió en la verdad de Dios para resistir la tentación y seguir la voluntad de Dios (Mateo 4: 1-10).

Entonces, si bien existe la posibilidad de que los cónyuges que viven separados el uno del otro puedan masturbarse sin pensamientos adúlteros o lujuriosos, parece que, según las Escrituras, es mejor abstenerse. Como el apóstol Pablo le aconsejó a Timoteo: "Huye de las malas pasiones de la juventud, y esmérate en seguir la justicia, la fe, el amor y la paz, junto con los que invocan al Señor con un corazón limpio." (2 Timoteo 2:22).