¿Qué era el 'Lugar Santísimo' o el 'Santo de los Santos'?

El Lugar Santísimo se refiere a la parte trasera, a la sala interior del tabernáculo de Moisés y a los templos que ocuparon el lugar del tabernáculo, empezando por el Templo de Salomón. El Lugar Santísimo era un cubo perfecto y contenía el Arca del Pacto. Los términos " Santo de los Santos" y "Lugar Santísimo" son intercambiables, dependiendo de la versión de la Biblia que se utilice.

Según la ley que Dios dio a Moisés, sólo el Sumo Sacerdote podía entrar en el Lugar Santísimo, y sólo una vez al año en el Día de la Expiación (Yom Kippur). Antes de entrar, el Sumo Sacerdote se lavaba, se ponía una ropa especial y recogía el incienso y la sangre de un animal sacrificado. Una vez dentro del Lugar Santísimo, el sumo sacerdote quemaba el incienso y luego rociaba la sangre sobre el propiciatorio del arca (la cubierta con las figuras de ángeles). Este acto formaba parte de una ceremonia que se completaba cada año y en la que los israelitas, como nación, pedían a Dios que les perdonara sus pecados.

El Lugar Santísimo estaba separado del resto del tabernáculo (y posteriormente del templo) por un gran velo. El velo estaba tejido con lino fino e hilo azul, púrpura y escarlata, y decorado con un elaborado bordado con una imagen de querubines de oro. El velo impedía que el pueblo llegara al Arca del Pacto y a la presencia de Dios.

El Lugar Santísimo fue objeto de tres acontecimientos importantes en la historia de Israel. En un determinado momento, la nación de Judá perdió el Arca del Pacto. Algunos años después, cuando las transgresiones de Judá se hicieron demasiado grandes, Dios permitió que Babilonia conquistara Jerusalén. Después del asedio, cuando el pueblo fue llevado al cautiverio, el ejército babilónico destruyó el Templo y el Lugar Santísimo.

Cuando el pueblo regresó del exilio, Zorobabel, Esdras y Nehemías los dirigieron en la reconstrucción de Jerusalén, lo que incluía la muralla y el Templo. Unos 500 años después, mientras Jesús estaba colgado en la cruz, el velo se rasgó de arriba abajo. Mateo 27:50-51 dice: "Mas Jesús, habiendo otra vez clamado a gran voz, entregó el espíritu. Y he aquí, el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo; y la tierra tembló, y las rocas se partieron". Al rasgar el velo, Dios demostró extraordinariamente que el pueblo ya no necesitaba una barrera que le impidiera acceder a Dios. Jesús nos lleva directamente a Dios. Hebreos 10:19-20 (NVI) dice: "Así que, hermanos, mediante la sangre de Jesús, tenemos plena libertad para entrar en el Lugar Santísimo, por el camino nuevo y vivo que él nos ha abierto a través de la cortina, es decir, a través de su cuerpo".

El tercer acontecimiento histórico importante que tuvo lugar relacionado con el Lugar Santísimo fue la destrucción del templo judío por los romanos en el año 70 d.C. Desde ese momento, los judíos no han tenido un templo que les permita adorar, y han pasado a reunirse en sinagogas locales. La Biblia dice que el Templo será reconstruido en algún momento antes de la mitad de la Tribulación (Daniel 9:27; Mateo 24:15; 2 Tesalonicenses 2:4).

El Lugar Santísimo servía como representación de la presencia de Dios con la nación de Israel. El velo protegía al pueblo pecador de Israel de la santidad de Dios. La muerte de Jesús en la cruz puso fin a la necesidad de este método de adoración, abriendo el acceso a Dios a todos los que creyeran en Jesús como Hijo de Dios (Juan 3:16).