¿Se puede 'devolver' la salvación?

Algunos creen que no se puede perder la salvación, pero sí se puede "devolver" la salvación o rechazar la salvación de Cristo y alejarse del Señor. En otras palabras, los que defienden este punto de vista creen que Cristo nunca va a abandonar a un cristiano, pero que un cristiano sí lo puede abandonar. ¿Acaso esto es cierto?

La Biblia nos proporciona una amplia evidencia de que un verdadero creyente nunca "devolverá" la salvación. Primero, está claro que una persona nunca va a buscar a Cristo sin que Dios la llame a Él. Romanos 3:10-11 dice: "No hay justo, ni aun uno; no hay quien entienda, no hay quien busque a Dios". Una persona sólo puede llegar a la fe en Jesús por la gracia de Dios (Efesios 2:8-9).

Segundo, una persona que de verdad tiene el Espíritu de Dios viviendo en su interior no se va a apartar de Cristo. Si bien cada cristiano sigue luchando con el pecado (Romanos 7:24-25), aquellos que han sido cambiados por la gracia de Dios no se pueden separar de Su amor. Romanos 8:38-39 usa palabras muy contundentes para reflejar esta verdad: "Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro".

En tercer lugar, la salvación de una persona no depende de sus obras, sino de la obra consumada de Jesucristo. Por lo tanto, la salvación no se puede ganar con buenas obras ni se puede perder con malas acciones. En cambio, los creyentes pueden descansar en lo que Cristo hizo en la cruz y vivir en servicio a Él como un acto de adoración.

Pero, ¿qué pasa con los que dicen seguir a Dios y luego abandonan la fe? A pesar de que sólo Dios conoce realmente el corazón de una persona, si nos basamos en la información que nos ofrece la Biblia, sólo hay dos posibles opciones. Primero, es probable que la persona sea un creyente que está viviendo en pecado y tiene dudas sobre su salvación. Segundo, es posible que la persona que dice "dejar la fe" nunca haya tenido una fe genuina.

Es más, Jesús lo predijo cuando enseñó: "No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad" (Mateo 7:21-23). A pesar de llamar a Jesús "Señor", de ser conocido por sus profecías, exorcismos y milagros, algunas personas que dicen conocer a Jesús en realidad son incrédulas. Por lo tanto, no debería sorprendernos que algunos de los que hoy en día afirman ser cristianos y después abandonan la fe nunca hayan sido cristianos de verdad.

Un cristiano no puede "devolver" la salvación porque este don depende del poder de Dios, no del nuestro. Por el contrario, los que abandonan la fe son aquellos que luchan y necesitan nuestra ayuda o que necesitan una fe verdadera y el auténtico Evangelio de Cristo.