¿Por qué el cristianismo es tan “sangriento”?

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En resumen:

El cristianismo es “sangriento” porque, según la Biblia, el derramamiento de sangre es necesario para el perdón de los pecados. La muerte sacrificial de Jesús en la cruz y el derramamiento de Su sangre proporcionaron la expiación por nuestros pecados, abriendo un camino para la reconciliación con Dios.

Del Antiguo Testamento

  • En Levítico 17:11, Dios enseña: “Porque la vida de la carne está en la sangre, y Yo se la he dado a ustedes sobre el altar para hacer expiación por sus almas; porque es la sangre, por razón de la vida, la que hace expiación”. Dios establece la sangre como medio de expiación, simbolizando la vida sacrificada por los pecados del pueblo. Esto prefigura el sacrificio definitivo de Jesucristo, cuya sangre proporcionaría la expiación perfecta y final por los pecados de la humanidad.

Del Nuevo Testamento

  • Solo la sangre de Cristo es perfecta para eliminar los defectos que nos han separado de Dios y hacernos aceptables a Él (Efesios 2:13). Es capaz de cerrar la brecha creada por el pecado. Mediante Su sacrificio, somos reconciliados con Dios, ya no estamos separados por nuestro pecado, y somos hechos aceptables a Sus ojos mediante la perfecta muerte expiatoria de Jesús.
  • Sin derramamiento de sangre no hay perdón de pecados. Este principio subraya la necesidad de la sangre para el perdón, destacando la gravedad del pecado y el profundo costo de la redención. Solo el sacrificio de Cristo trae el perdón que necesitamos desesperadamente.
  • Jesús nos ama y nos ha liberado de nuestros pecados derramando Su sangre por nosotros (Apocalipsis 1:5). La sangre de Jesús nos perdona y nos libera del yugo del pecado.

Implicaciones para hoy

Los cristianos ya no ofrecen sacrificios de sangre, puesto que Jesús es el cumplimiento de la ley (Mateo 5:17). En cambio, aceptan el sacrificio de sangre de Jesús en la cruz como suficiente para perdonar el pecado (Mateo 26:27-28). Recordamos el sacrificio de Su sangre en el acto de la Comunión, adorando al Señor por darnos a Su Hijo unigénito para ofrecernos la vida eterna (Juan 3:16). Aunque muchos se sientan incómodos con la idea de que el cristianismo sea una religión “sangrienta”, es por la sangre de Jesús que nos hemos acercado a Él. El apóstol Pablo instruyó en Efesios 2:13: “Pero ahora en Cristo Jesús, ustedes que en otro tiempo estaban lejos, han sido acercados por la sangre de Cristo”. El libro de Apocalipsis añade que Jesús es Aquel que “nos ama y nos libertó de nuestros pecados con Su sangre” (Apocalipsis 1:5). El sacrificio de Jesús ha tendido para siempre un puente entre la humanidad y el Creador, demostrando la profundidad de Su amor y Su gracia. A la luz de esto, estamos llamados a vivir con admiración y gratitud, honrando continuamente Su sacrificio al vivir para Él y abrazar la vida abundante que nos ofrece. La sangre de Cristo no solo nos limpia, sino que también nos atrae a Su abrazo eterno, dándonos el poder de caminar en una vida nueva.

Comprende

  • La sangre expía el pecado, prefigurando el sacrificio final de Cristo.
  • Solo la sangre de Jesús nos salva y restaura nuestra relación con Dios, tratando con la ruptura causada por el pecado.
  • La sangre de Cristo ofrece perdón y vida eterna.

Reflexiona

  • ¿Cómo influye el sacrificio de la sangre de Jesús en tu comprensión de la gravedad del pecado y del costo de tu redención?
  • ¿Cómo respondes a la idea de que la sangre de Cristo es el puente que te lleva a la restauración y a la relación con Dios?
  • ¿Cómo afecta la reflexión sobre la sangre de Cristo a tu caminar diario con Él y a tu gratitud por Su sacrificio?

Ponlo en práctica

  • ¿Cómo podemos explicar a los demás el significado de los sacrificios de sangre en la Biblia y cómo apuntan al sacrificio supremo de Cristo?
  • ¿Qué significa para nosotros hoy que “sin derramamiento de sangre no hay perdón” (Hebreos 9:22)? ¿Cómo profundiza esto nuestra comprensión del carácter y la gracia de Dios?
  • ¿Cómo podemos vivir a la luz de la realidad de que la sangre de Cristo nos ha liberado del yugo del pecado и nos ha acercado a Dios?