¿Acaso Jesús existía antes que Abraham?

Jesús hizo muchas declaraciones controversiales en los Evangelios, las cuales generalmente estaban relacionadas con Su señorío. En Juan 8, los judíos estaban en un debate con Jesús. Ellos afirmaban que estaban honrando a Dios, y Él les decía que no, porque ahí estaba Él, Dios en medio de ellos, y ellos no podían reconocerlo. Jesús les dijo: "Abraham vuestro padre se gozó de que había de ver mi día; y lo vio, y se gozó. Entonces le dijeron los judíos: Aún no tienes cincuenta años, ¿y has visto a Abraham? Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, yo soy" (Juan 8:56-58; ver también Juan 13:19). Observemos que cuando Jesús se refirió a Abraham en tiempo pasado, se refirió a sí mismo en tiempo presente, sugiriendo Su existencia preexistente y continua.

Jesús aludió a lo que Dios dijo a Moisés en la zarza ardiente: "Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY". (Éxodo 3:14; ver también Isaías 41:4). Esto es lo que hizo que los judíos en Juan 8:59 se indignaran y trataran de apedrear a Jesús; Él afirmaba ser lo mismo que Dios, lo cual estaba prohibido por la Ley y se castigaba con la muerte (Levítico 24:16). Jesús escapó de los judíos y se escondió en medio del alboroto.

En Génesis 18, el propio Abraham tuvo un encuentro con el Señor, a quien se refiere indistintamente como un "hombre" y el "Señor" (Génesis 18:2, 10, 13, 16, 17, 22). Esta aparición preencarnada de Cristo es un ejemplo de una cristofanía del Antiguo Testamento, y Abraham recibió al Señor con honores (Génesis 18:2-5). Esto demuestra que Jesús existió antes que Abraham, porque comió con Abraham y Sara en su tienda y profetizó que Sara daría a luz en su vejez (Génesis 18:9-15).

Jesús hizo muchas declaraciones proclamando Su divinidad en todos los Evangelios, y Su resurrección de entre los muertos dejó claro que Sus afirmaciones sobre la divinidad eran realmente verdaderas. Él es "Dios sobre todas las cosas" (Romanos 9:5). Jesús es Dios, por lo tanto, existía antes que Abraham. Juan 1:2 dice que "Él estaba en el principio con Dios". Él "se hizo carne y habitó entre nosotros", lo que implica que Jesús existía antes de hacerse carne (Juan 1:14; ver también Colosenses 1:16-17; 1 Juan 4:14). Jesús es "YO SOY", el "Alfa y la Omega, el principio y el fin, el primero y el último" (Apocalipsis 22:13).