¿Tiene la Biblia una lista de pecados?

En resumen:

¿QUÉ DICE LA BIBLIA?

La Biblia ofrece varias listas de pecados, aunque ninguna de ellas es exhaustiva. Estas listas destacan comportamientos y actitudes específicos que van en contra de la voluntad de Dios, revelando las consecuencias destructivas del pecado. Sin embargo, seguir simplemente estas listas no puede purificar tu corazón, ya que la verdadera obediencia procede de un corazón transformado por el poder del Espíritu Santo. Jesús subrayó la importancia de la pureza de corazón, no solo de las acciones externas, como fundamento para agradar a Dios. En última instancia, es a través de la gracia de Dios, no siguiendo las reglas, que eres capaz de vivir de una manera que lo honra, ya que eres santificado y guiado por el Espíritu Santo para ser transformado a semejanza de Cristo.

DEL ANTIGUO TESTAMENTO

DEL NUEVO TESTAMENTO

IMPLICACIONES PARA HOY

Tanto el Nuevo Testamento como el Antiguo proporcionan muchas listas de pecados. Sin embargo, ninguna de ellas muestra todos los pecados posibles. El pecado no consiste solo en quebrantar una regla, sino que las reglas te revelan el carácter de Dios y cómo quiere que reflejes Su carácter en tu vida. Comprender estas listas te ayuda a identificar los efectos destructivos del pecado en tu mundo, pero también te recuerda que seguir las reglas por sí solo no limpiará tu corazón. La verdadera obediencia surge del amor a Dios y del poder de Su Espíritu que te transforma a Su semejanza. Dios no quiere mera obediencia externa; Él desea corazones que reflejen Su carácter y amor por los demás. Dios produce el deseo y la voluntad de hacer lo que le agrada, y a medida que vives según el Espíritu y no según la carne, tu mente, corazón y acciones son transformados. Al someterte al Espíritu Santo, Él te santifica y te lleva a la justicia, no basada en listas o reglamentos externos, sino basada en un corazón transformado. En este proceso, no solo evitas el pecado, sino que buscas activamente una vida que honre a Dios. En última instancia, es la gracia de Dios, no tus propios esfuerzos por seguir las reglas, lo que te permite agradarle.

COMPRENDE

REFLEXIONA

PONLO EN PRÁCTICA