www.CompellingTruth.org/Espanol
¿Por qué los magos le dieron a Jesús oro, incienso y mirra?
Cuando los sabios (o magos) encontraron a Jesús, se inclinaron y le presentaron regalos de oro, incienso y mirra (Mateo 2:11). ¿Por qué le fueron dados estos dones a Jesús?
El oro ha servido históricamente como un metal precioso y una forma de moneda. Este regalo les habría proporcionado a José y María la posibilidad de pagar los gastos como nuevos padres. Este regalo probablemente también sostuvo a la familia durante su tiempo en Egipto (Mateo 2: 13-15). Algunas tradiciones señalan además que el oro es un símbolo de la divinidad, reconociendo a Jesús como Dios en forma humana.
El incienso es una resina blanca de los árboles de Boswellia que se ha utilizado durante mucho tiempo para incienso o perfume. Esta resina también se ha utilizado como medicina tradicional en algunas culturas. Los sabios probablemente presentaron incienso como un perfume o aceite para ser usado por Jesús. El incienso también se usaba durante la adoración (Éxodo 30:34), quizás simbolizando la santidad. Como el incienso en el Antiguo Testamento, Jesús sería entregado como ofrenda por los pecados de la humanidad.
La mirra se ha utilizado a lo largo de la historia de diversas formas. Tomado de la resina de los árboles en Arabia de la familia Commiphora, a menudo se usa como perfume. Otros usos han incluido el medicinal como ayuda digestiva cuando se mezcla con vino, cosmético o para purificación (Ester 2:12) y embalsamamiento. Las tradiciones a menudo conectan la mirra con la mezcla de vino ofrecida a Jesús en la cruz (Marcos 15:23) y asocian su sabor amargo con el sufrimiento que Jesús soportó en la cruz. El uso de mirra en el embalsamamiento también se ha asociado con la muerte de Jesús.
Si bien el simbolismo de estos tres regalos a menudo se destaca más hoy en día, los regalos fueron prácticos y generosos. Los sabios ofrecieron oro, el equivalente a dar dinero a la familia de un recién nacido, una importante necesidad práctica para una nueva familia joven. Tanto el incienso como la mirra eran muy valorados en la cultura del primer siglo, destacando un regalo que era especial pero que también tenía un valor práctico como aceite para Jesús y quizás para los miembros de su familia.
Al final, estos magos dieron lo que tenían para mostrar su devoción a Jesús como el nuevo rey. Se convirtieron en los primeros no judíos en reconocer la importancia de Jesús, viajaron una gran distancia a un gran costo para adorarlo, le dejaron obsequios generosos y regresaron a casa como Dios lo ordenó para mantener a salvo a Jesús y su familia. Su honorable legado continúa impactando vidas hoy como aquellos que buscaron al Hijo de Dios y lo reconocieron como rey.
Copyright 2011-2024 Got Questions Ministries - All Rights Reserved.