¿Con cuánta frecuencia deben tener relaciones sexuales las parejas casadas?

La Biblia no menciona la frecuencia con la que una pareja casada debe tener relaciones sexuales. Sin duda, será un acto en función de la proximidad, el momento de la vida e incluso de la logística. En general, los cónyuges deben comunicarse entre sí y llegar a una resolución de común acuerdo. Un posible compromiso es que si uno de los cónyuges inicia y el otro se niega, el cónyuge que se negó está obligado a reiniciar dentro de veinticuatro horas. 1 de Corintios 7: 4 explica que los cónyuges tienen tanto el derecho a disfrutar del cuerpo del otro como la responsabilidad de respetar los deseos del otro. Una vida sexual saludable desalienta el pecado a medida que la pareja aprende a estar satisfecha el uno con el otro y crecen juntos como pareja.

Dios diseñó el sexo para que fuera una parte importante de la relación matrimonial. No es absolutamente obligatorio, ya que algunas parejas experimentarán períodos prolongados de separación o problemas físicos que harán que el sexo sea imposible, pero el sexo en el matrimonio aun así es importante. 1 de Corintios 7: 5 nos exhorta a no privarnos el uno del otro. Si el horario de actividades de una pareja es tal que simplemente están demasiado cansados o no tienen tiempo, la pareja debe abordar el tema. No es bíblico dejar pasar este tema por alto. Otro problema tristemente común son las relaciones sexuales dolorosas. Por la salud del matrimonio, si uno u otro cónyuge encuentra que el coito es físicamente doloroso, debe buscar la ayuda de un médico o consejero.