¿Hay ángeles entre nosotros?

Hay muchas referencias de personas que encuentran ángeles en la Biblia. Algunas veces los ángeles aparecían en su forma sobrenatural y otras veces parecían humanos comunes. El autor del libro de Hebreos dijo: "No se olviden de practicar la hospitalidad, pues gracias a ella algunos, sin saberlo, hospedaron ángeles." (Hebreos 13: 2). Este versículo se refiere al encuentro de Abraham con ángeles que parecían hombres (Génesis 18).

Las Escrituras brindan muchos ejemplos de ángeles que hacen la obra de Dios. Vienen como mensajeros de Dios que brindan instrucción y buenas nuevas, aparecen en visiones y sueños, ayudan y protegen a las personas y rinden culto a Dios. Varias veces se les aparecieron ángeles a hombres y mujeres anunciando que Dios los iba a bendecir con un hijo. Esto le sucede a la madre de Sansón (Jueces 13), Zacarías, el padre de Juan el Bautista (Lucas 1:13), y José y María, los padres de Jesús (Lucas 1:30; Mateo 1: 20–21). Los ángeles alentaron a Agar, la madre de Ismael (Génesis 16: 7–14). Los ángeles protegieron a Daniel cuando lo arrojaron al foso de los leones y acudieron a él en visiones dándole conocimiento de lo que sucedería en el tiempo del fin (Daniel 6:22; 10: 12–14). Un ángel protegió a los israelitas mientras viajaban a la Tierra Prometida yendo por delante de ellos para que pudieran derrotar con éxito a las naciones en su camino (Éxodo 23:20). Otro vino a José en un sueño advirtiéndole que llevara a María y a Jesús a Egipto para escapar del rey Herodes que quería que el bebé Jesús muriera (Mateo 2:13). Una hueste entera de ángeles apareció a pastores la noche en que Jesús nació y alabaron a Dios (Lucas 2: 9–14).

Está claro que los ángeles han jugado un papel clave en el cumplimiento de los planes de Dios. Sin embargo, ¿los ángeles siguen haciendo la obra de Dios en la tierra hoy? Apocalipsis describe a muchos ángeles santos que hacen la obra de Dios en los últimos tiempos. Adorarán a Dios en su trono, lucharán contra los demonios, tocarán las siete trompetas de juicio y predicarán el evangelio alrededor del mundo (Apocalipsis 5:11; 8: 2; 14: 6). La Biblia también nos dice que los demonios, que son ángeles caídos, deambulan por la tierra con la intención de causar destrucción y alejar a las personas de Dios (Mateo 12: 43–45). Siguen a Satanás cuyo propósito es engañar y matar. El libro de Apocalipsis nos dice que un día él personificará a una persona como el Anticristo.

Basado tanto en su papel histórico como en los planes futuros de Dios, podemos decir que sí, hay ángeles entre nosotros. Aunque no podemos estar seguros de cómo aparecerán o si sabremos cuándo nos encontremos con uno, podemos estar seguros de que los santos ángeles están aquí para cumplir el plan de Dios. Dicho esto, es importante recordar que no debemos adorar a los ángeles por su trabajo; solo Dios es digno de nuestra adoración (Nehemías 9: 6; Apocalipsis 19:10; 22: 8–9). Además, debemos discernir para no ser engañados por demonios que actúan bajo falsas pretensiones (2 Corintios 11: 14–15; 1 Juan 4: 1).