¿Era Satanás un ángel?

La mayoría de las referencias bíblicas al origen de Satanás son simbólicas, y a medida que profundizamos en estos pasajes, encontramos que si bien Satanás no es descrito explícitamente como un ángel, si no fue un ángel ciertamente fue una criatura angelical. Comenzando con Ezequiel 28: 12-18, que presumiblemente es una narración de la caída de Satanás del cielo, parece que a Satanás se le conoce como un "querubín protector". Como los querubines son un tipo de ser angelical, se puede decir que Satanás era una especie de ángel.

En la Biblia, se menciona a Satanás entre grupos de ángeles (Job 1: 6–7), además de tener sus propios ángeles (Mateo 25:41). Cuando se habla de la guerra de los últimos tiempos que tendrá lugar en el cielo, Apocalipsis 12: 7–9 menciona al Diablo y sus ángeles en conflicto directo con Miguel el arcángel y sus ángeles: "Se desató entonces una guerra en el cielo: Miguel y sus ángeles combatieron al dragón; este y sus ángeles, a su vez, les hicieron frente, pero no pudieron vencer, y ya no hubo lugar para ellos en el cielo. Así fue expulsado el gran dragón, aquella serpiente antigua que se llama Diablo y Satanás, y que engaña al mundo entero. Junto con sus ángeles, fue arrojado a la tierra." La posición técnica de Satanás como ángel no es la idea principal, porque de cualquier manera podemos saber con certeza que es un ser de tipo angelical con conexión con los ángeles.

En Apocalipsis 12: 4, la imagen del dragón se usa para referirse a Satanás y se indica que un tercio de los otros ángeles (conocidos como estrellas) cayeron del cielo con él. Entonces, ¿por qué un ángel como Satanás se rebeló contra Dios en primer lugar? El libro de Isaías utiliza el simbolismo una vez más para hacernos saber que la caída de Satanás fue orgullo: "¡Cómo has caído del cielo, lucero de la mañana! Tú, que sometías a las naciones, has caído por tierra. Decías en tu corazón: «Subiré hasta los cielos. ¡Levantaré mi trono por encima de las estrellas de Dios! Gobernaré desde el extremo norte, en el monte de la reunión. Subiré a la cresta de las más altas nubes, seré semejante al Altísimo»."(Isaías 14: 12–14). Este pasaje nos muestra que Satanás no deseaba adorar a Dios, sino que él deseaba ser Dios y ser adorado. "Lucero de la mañana" se traduce como "Lucifer" en algunas traducciones, por lo que este pasaje también es donde obtenemos el nombre "Lucifer" para Satanás. Satanás fue expulsado del cielo, y el castigo por su orgullo es la condenación final, pasar una eternidad en el lago de fuego (Apocalipsis 20:10; Isaías 14:15).