¿Qué son los libros católicos apócrifos / deuterocanónicos?

Los apócrifos (también llamados libros deuterocanónicos) están incluidos en las Biblias católicas romanas y son utilizados por otras tradiciones dentro del cristianismo. ¿Cuáles son estos escritos adicionales? ¿Cuál es su origen? Primero, las palabras mismas puede que causen algo de confusión en algunos lectores. La palabra apócrifo significa "oculto", mientras que la palabra deuterocanónico significa "segundo canon". Los libros apócrifos se escribieron principalmente durante el período de cuatrocientos años entre el fin de la escritura del Antiguo Testamento y el comienzo de los eventos del Nuevo Testamento (también incluyen adiciones a los libros de Ester y Daniel del Antiguo Testamento). Estos libros incluyen 1 Esdras, 2 Esdras, Tobit, Judit, Sabiduría de Salomón, Eclesiástico, Baruc, la Carta de Jeremías, Oración de Manasés, 1 Macabeos y 2 Macabeos.

Dentro del judaísmo temprano, los escritos apócrifos fueron tratados con respeto, pero no fueron aceptados como libros de la Biblia hebrea. La iglesia cristiana primitiva debatió la importancia de los escritos apócrifos, pero pocos cristianos primitivos creían que pertenecían al canon de las Escrituras. El Nuevo Testamento cita pasajes del Antiguo Testamento cientos de veces, pero en ninguna parte cita ninguno de los libros apócrifos. Además, contienen muchos errores históricos comprobados y contradicciones.

Los libros apócrifos también enseñan algunas prácticas que son inconsistentes con las enseñanzas de las Escrituras. Mientras que muchos católicos aceptaron los apócrifos con anterioridad, la Iglesia Católica Romana agregó oficialmente los apócrifos a su Biblia en el Concilio de Trento a mediados del año 1500 d.C., principalmente en respuesta a la reforma protestante. Parte de la razón de esto es que los apócrifos apoyan algunas de las tradiciones que practica la Iglesia Católica Romana que no se enseñan en la Biblia. Por ejemplo, las prácticas católicas romanas de orar por los muertos, hacer peticiones a los "santos" en el cielo con oraciones y "dar limosnas" para expiar los pecados (pagar indulgencias). Todo esto encuentra apoyo en los libros apócrifos, no en la Biblia.

Algunos de los apócrifos incluyen información importante y útil, pero debido a sus errores históricos y teológicos, estos libros deben ser vistos como documentos históricos y religiosos falibles, no como la inspirada y autoritaria Palabra de Dios.